Enero, nuevo año, nuevos amigos, nuevo todo

En este mes de enero ha sido un poco difícil comenzarlo, pero como dice Mariana, con la misma fuerza que me tumban, con esa misma fuerza me levanto y acá estoy levantándome y fortalecido. 

Este año ha empezado con trabajo, hay cosas buenas y lo mejor es que todo puede ser. La ciudad esta un poco sola, y aún sigo sin entender porque la gente sigue pensando que soy americano o europeo, es tanto así que ya respondo cuando me llaman rubio, americano, español o italiano, los he tomado como mis nuevo nickname o apodos porque así me llaman. 

En la primera semana de enero tuve la oportunidad de reencontarme con mi amigo Juan Pablo que regresó de Cuba, él es cubano. Y bueno hablamos mucho de lo que paso en diciembre y de sus aventuras en La Habana, ese mismo día que me encontré con él, decimos ir a caminar y encontramos con unos amigos de él y tomamos en un parque en la Zona Colonial, donde me presentaron a Nanita, Grace, Dionella, Amín y Pedro. Desde ese momento entramos en confianza y todo comenzó a ir mejor con ese grupo de personas, ellos son de Boca Chica y Santiago. 

Por ahora no tengo días libres en mi trabajo pero ando más relajado de trabajo. En el trabajo también suelen decirme rubio, los clientes. 

En el segundo fin de semana me reuní nuevamente con los nuevos amigos que conocí y fuimos a casa de Nanita para tomar mucho y de verdad que tomamos mucho y jugamos mucha cartas al estilo de este país. 

Aún con 5 meses acá no logro entender con claridad lo que dicen los lugareños, hablan muy rápido y recortan todo, de hecho, en mi trabajo a veces tengo que pedir a un empleado lo que quiso decir el otro empleado porque no entiendo o cuando a veces un cliente me habla, también debo pedir ayuda. 

En este tercer fin de semana de enero, fui a casa de Dionella a tomar mucho, fue tanto que ni recuerdo cuando caí dormido en la cama de Grace, ella estaba en Boca Chica, y tomamos tanto que hasta envíe mensajes indebidos a Yvette. Por cierto, hablando de Yvette, ya la extraño mucho y cuento las horas para que este acá conmigo. Ya falta menos, solo horas. 

El día 21, lunes yo salí de mi trabajo y tenía una decisión importante que tomar, pero no fue hasta que salí del trabajo que yo decidí y luego corrí para llegar al Play (estadio de baseball) para ver la final entre Águilas del Cibao y Leones del Escogido, fui con una amiga Dory y un grupo de amigas de ellas y fue ahí donde conocí a Andrew y Rachel (ya les contaré sobre ellos). 

En esa misma semana yo conocí a un modelo de Haití y ahí he compartido con él algunos días para ir al cine o para comer o para bailar con Rachel. Esta tercera semana de enero hay más que contar, pero en el próximo post lo contaré, ya me canse de escribir hoy. Además debo irme a mi asa a poner traje porque tengo un evento al cual me han invitado hoy y es con traje formal.

No hay comentarios.:

Publicar un comentario

Nota: sólo los miembros de este blog pueden publicar comentarios.